por Néstor Echarte
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NOTA MUY IMPORTANTE: NO SE HAN INCLUÍDO LOS GRÁFICOS QUE ACOMPAÑAN A ESTE TEXTO. TENDRÁN QUE PEDIRSE AL AUTOR DEL TEXTO EN LA DIRECCION QUE SE INDICA AL FINAL. ASTROLOGÍA Y SISMOLOGÍA INTRODUCCIÓN: El vasto campo de acción y las múltiples aplicaciones que la Astrología nos propone, permite que nos internemos en el conocimiento de distintas disciplinas científicas, ampliando el horizonte de sus investigaciones mediante el empleo de lo que podría llamarse una nueva metodología, que contribuya a integrar los distintos conocimientos que hacen a la investigación científica. Esta integración, que enriquece tanto a la Astrología como a la ciencia con la que esta colabora, no va en desmedro de la especialización, ya que el conocimiento integral es el resultado de distintas especializaciones que con el tiempo conforman un todo. La Astrología, por si sola, contiene la representación simbólica de todo evento, tanto en el orden individual (psicológico y material), como en el orden terrestre (lo que podríamos denominar Astrología Mundial). Por otra parte, la Sismología es una ciencia exacta que tiene sus leyes y cumple con todos los requisitos necesarios para que la estructura de su conocimiento se asiente sobre bases sólidas. La integración de estas dos ciencias, para lograr un mutuo enriquecimiento, y perfeccionar sus técnicas y procedimientos, es el objeto de este trabajo, pero lógicamente, por tratarse de una investigación de tipo astrológico, haremos más hincapié en este tema. SISMOLOGÍA: Para lograr esto, vamos a apartarnos momentáneamente del tema puramente astrológico (al que abordaremos luego con algunos ejemplos) para hacer algunas breves pero necesarias consideraciones sobre el origen y las causas de los terremotos, sobre la sismología como ciencia, y por fin, su posible conexión con el simbolismo astrológico. Los terremotos son movimientos de tierra que se producen en la Litosfera, es decir en la primera capa de la corteza terrestre, la que llega a tener un espesor de hasta 100 kmts. El epicentro del terremoto, se encuentra siempre en la profundidad de la corteza terrestre. En la actualidad, existe una teoría llamada "tectónica de placas", que sostiene que esta corteza está formada por aproximadamente 12 placas independientes de tamaños subcontinentales, las que por alguna razón se mueven. El movimiento o desplazamiento de alguna de estas placas, produce un efecto de rozamiento o de choque con las placas vecinas, experimentando las rocas que se encuentran ubicadas en los bordes de las placas, una tensión que aumentará en la medida que la resistencia y la elasticidad de las rocas lo permita. Cuando esta elasticidad llegue a su máximo, las rocas se fracturarán dando origen a un "terremoto", el cual siempre se produce a lo largo de los bordes de estas placas, cuyos puntos de unión son los que se denominan "fallas". El tiempo que transcurre desde el momento en que se produce la tensión hasta el momento en que las rocas se fracturarán originando el terremoto, puede oscilar entre